Un juez de Guatemala ha ordenado la detención del presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, acusado de corrupción, una trama conocida como 'La Línea'. La portavoz de la Fiscalía, Julia Barrera, explicó a periodistas que el propio Ministerio Público pero no sabe cuando se hará efectiva.
El general retirado perdió sus privilegios tras el voto unánime de 132 diputados presentes en el Congreso, después de que el MP y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, CICIG, lo acusaran el 21 de agosto de corrupción.
De acuerdo con la investigación de más de 18 meses de ambas entidades, Pérez Molina supuestamente dirigía la red clandestina dentro de la Superintendencia de Administración Tributaria, SAT, con la complicidad de al menos 28 personas, incluida su exvicepresidenta, Roxana Baldetti, en prisión desde el 21 de agosto.
El abogado personal del presidente, César Calderón, indicó que para evitar que Pérez Molina sea llevado "a la fuerza" por las autoridades, acudirán de forma voluntaria ante el juzgado, aunque no especificó la hora.
Cuestionado por dónde se encuentra el mandatario, Calderón manifestó que salió de la Casa Presidencial hace "pocos minutos", pero que no le preguntó hacia dónde se dirigía, aunque supone que va camino a su residencia.
Pérez Molina se puso a disposición del juzgado que lleva el caso en su contra, por medio del letrado, para tratar de evitar así "el espectáculo" que conllevaría ser detenido. El jurista intentó blindar a su defendido y por ello entregó un recurso al juez Miguel Ángel Gálvez, a cargo del Juzgado B de Mayor Riesgo, para mostrar la voluntad del presidente.
El mandatario, quien tomó posesión el 14 de enero de 2012 como gobernante y se mantuvo encerrado en la Casa Presidencial, apareció por última vez en público el lunes y durante los últimos dos días repitió, siempre a través de su portavoz, Jorge Ortega, que no dimitirá, al menos, por el momento.