El secretario de Estado de Inmigración del Reino Unido, Robert Goodwill, ha anunciado que Londres levantará un muro en el norte del puerto francés de Calais para tratar de impedir que los inmigrantes suban a los camiones e intenten cruzar el canal de la Mancha.
El muro, de algo más de un kilómetro de longitud y cuatro metros de alto, costará en torno a 1,9 millones de libras, más de dos millones de euros, y comenzará a edificarse a finales de septiembre.
"La gente todavía está entrando. Hemos puesto vallas y ahora vamos a construir un muro como parte del incremento de la seguridad en la zona", señaló Goodwill en una sesión en la Cámara de los Comunes.
El anuncio del Gobierno de la primera ministra Theresa May se produce días después de que un grupo de refugiados e inmigrantes protagonizaran varios incidentes en Calais. Colocaron troncos de árboles, carros de la compra y piedras para intentar detener los vehículos y subir a bordo.
Según las autoridades británicas, el muro, que podría estar acabado para finales de año, se edificará con un hormigón ligeramente resbaladizo para que resulte más difícil escalarlo. La construcción estará dividida en dos secciones. Estas se instalarán a cada lado de la principal vía de acceso al puerto, que estará adornada con flores y plantas para reducir su impacto visual en la zona.