La invasión rusa cumple seismeses mientras Ucrania celebra su Día de la Independencia. Una efeméride que llega bajo la amenaza de que Moscú recrudezca sus ataques, advertida por Estados Unidos, y en un momento en que no se vislumbra el final del conflicto, con las conversaciones de paz estancadas y las tensiones en aumento por el reciente asesinato de Daria Duguina.
Este martes, Volodímir Zelenski prometía una "respuesta contundente" si Rusia decide intensificar sus bombardeos estos días. Lo hacía durante la cumbre de la Plataforma de Crimea, donde el presidente ucraniano cifraba en 750 los misiles de crucero lanzados por Rusia desde la península, anexionada por Moscú en 2014, desde que Vladímir Putin lanzó su invasión del país vecino en febrero de este año.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, auguraba un invierno "duro", ante lo que se ha convertido en una "guerra de desgaste" con "una batalla de voluntades" y "logística". Una situación frente a la que tanto la Alianza Atlántica como la Unión Europea han expresado su respaldo a Kiev "el tiempo que sea necesario".
El conflicto, además, atraviesa la barrera del medio año en un momento especialmente tenso tras el asesinato con coche bomba de Daria Dúguina, hija de uno de los principales ideólogos de Putin, Aleksandr Duguin. Un atentado del que Moscú culpa a Kiev, que niega cualquier vinculación con el asesinato.
Por otra parte, Zelenski aseguraba este martes que la bandera ucraniana volverá a ondear sobre todas la zonas ocupadas, en un momento en que las tropas rusas controlan ya una parte importante de la región del Donbás y enclaves tan importantes como la ciudad portuaria de Mariúpol, cuya caída tras semanas de resistencia ucraniana en la acería Azovstalha sido uno de los puntos de inflexión en el transcurso de la guerra.
Precisamente, en las últimas horas la ONU ha advertido de que un juicio contra los prisioneros capturados por los rusos en esa ciudad ucraniana podría suponer un crimen de guerra, en un momento en el que algunos de los combatientes liberados han denunciado torturas físicas y psicológicasdurante su cautiverio.
En cualquier caso, las conversaciones de paz no han llegado a buen puerto estos meses y se encuentran completamente estancadas. El propio Zelenski afirmaba hace unos días que no es realista plantearse negociación alguna mientras la invasión continúe y las tropas rusas sigan matando ucranianos. Este martes se reafirmaba: "En el punto en el que estamos, no estamos listos para un alto el fuego. Ya explicamos que no habrá Minsk 3", aseveraba, en alusión a los encuentros bilaterales mantenidos en Bielorrusia.
Entretanto, otro de los grandes puntos de tensión es la central nuclear de Zaporiyia, con ambas partes acusándose mutuamente de planear atentados terroristas contra la planta. Algo que, de producirse, tendría efectos catastróficos, tal y como explicábamos aquí:
Cronología de seis meses de invasión
Así las cosas, Rusia continúa en estos momentos su ofensiva en el este del país vecino, con Zaporiyia y Jersón en el punto de mira, regiones clave para establecer un corredor terrestre entre el Donbás y Crimea.
A continuación, repasamos algunos de los principales hitos de estos seis meses de guerra, que se han cobrado al menos 5.587 víctimas mortales y 7.890 heridos, de acuerdo con Naciones Unidas. Seis meses en los que 942 menores han padecido el impacto de la guerra, con 586 niños heridos y 356 muertos. De cada seis niños fallecidos, uno tenía menos de cinco años.
Inicio de la invasión
Putin lanza su invasión contra Ucrania en la madrugada del 24 de febrero, días después de reconocer la independencia de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk. Rusia bombardea la capital ucraniana, Kiev, así como Járkov y Dnipró. La primera ronda de negociaciones ruso-ucranianas tiene lugar el 28 de febrero.
Toma de Jersón y asedio de Mariúpol
En marzo, Rusia irrumpe en Jersón y continúa el asedio de la ciudad costera de Mariúpol, donde bombardea un hospital materno-infantil. Moscú ataca la central nuclear de Zaporiyiay toma Chernóbil, mientras continúa el asedio de varias ciudades ucranianas.
Liberación de Kiev
A finales de marzo, Ucrania recupera Irpín y evita el cerco a la capital. La retirada de las tropas rusas de la región de Kiev revela la masacre perpetrada en Bucha, donde se descubren centenares de cadáveres. El 8 de abril, Rusia ataca la estación de Kramatorsk, en Donetsk, donde se concentraban refugiados que querían huir del país.
Toma de Mariúpol
El 11 de abril, las milicias prorrusas toman el puerto de Mariúpol. Días después, se hunde el Moskvá, el buque insignia de la flota rusa en el mar Negro, hundimiento que Moscú atribuye a una tormenta y que Kiev reivindica. El 21 de abril, Rusia anuncia la toma de Mariúpol, pero un último reducto de resistencia permanece en la metalúrgica de Azovstal, que cae finalmente el 17 de mayo.
Ofensiva en el Donbás
A finales de mayo, Rusia acelera su ofensiva en el Donbás hacia el estratégico enclave de Severodonetsk, que logra tomar por completo un mes después. A principios de julio, Rusia da por tomada Lisichansk y con ella toda la región de Lugansk.
Acuerdo para exportar cereales
El 22 de julio, Ucrania y Rusia alcanzan un acuerdo -con la mediación de la ONU y Turquía- para crear un corredor marítimo seguro para sacar cereal desde los puertos del mar Negro. El primer barco sale de Odesa el 1 de agosto.