La toma de posesión del cargo de Donald Trump como presidente de Estados no ha estado exenta de polémica por las protestas por la jura del magnate republicano y por la dureza de las declaraciones en su primer discurso como presidente.
No obstante, su esposa Melania también ha centrado el interés mediático, y ha sido nada más aparecer en la ceremonia. La recién nombrada Primera Dama de Estados Unidos ha asistido a la jura del cargo de su marido con un estilismo que enviaba un llamativo y directo mensaje a la dirección que tomaría en su nuevo cargo.
Ataviada con un elegante vestido de color azul celeste, con una chaqueta hecha a medida por el diseñador Ralph Lauren y unos guantes y 'stilettos', todo en el mismo tono, Melania no ha dejado lugar a la duda del propósito de su estilismo: realizar un homenaje a la que fuera una de las primeras damas más conocidas de Estados Unidos, Jacqueline Kennedy.
De hecho, la única diferencia entre ambas mujeres es que, en el día de la toma de posesión del cargo de kennedy, Jackie lucía su vestido en un azul más pálido, acompañado de un sombrero y unos guantes y a juego. De ser así, Melania habría mostrado un 'descarado' guiño al mostrar su modelo a seguir en su nuevo puesto.
La nueva Primera Dama ha tenido difícil encontrar quien la vistiera, pues son muchos los diseñadores que se mostraron contrarios a vestirla como rechazo a la presidencia de Donald.