Al menos 42 personas han muerto y unas 400 han resultado heridas en cuatro atentados distintos perpetrados desde el viernes en Kabul, en Afganistán. El estado en el que han quedado los edificios es deplorable, totalmente destruidos. Uno de los atentados, un ataque suicida contra una academia policial, ya ha sido reivindicado por el movimiento talibán. Entre los muertos hay un soldado y ocho civiles que formaban parte de una misión de la OTAN.