El Ejército nigeriano ha desmentido la liberación de la familia francesa, compuesta por 3 adultos y 4 niños de entre 5 y 12 años, secuestrada en un parque natural al norte de Camerún el pasado martes.
Medios galos, que citaban a fuentes militares nigerianas, habían asegurado que los rehenes habían sido puestos en libertad en la localidad de Dikwa, en el estado nigeriano de Borno, a un centenar de kilómetro de la frontera camerunesa.
El portavoz de la Fuerza de Acción Conjunta del Ejército nigeriano, el teniente coronel Sagir Musa, ha confirmado que los franceses "no han sido liberados". "Si hay alguna novedad sobre el tema, informaremos a los medios de comunicación", ha agregado Musar sin aportar más detalles.
El ministro delegado de Antigua Combatientes de Francia, Kader Arif, había confirmado la información aportada por los medios galos durante una sesión parlamentaria en la Asamblea Nacional, pero poco después rectificó y señaló que, "por el momento no hay un confirmación oficial".
Aunque nadie se ha atribuido la autoría del secuestro, las autoridades sospechan que podría ser obra bien de la secta radical islámica nigeriana Boko Haram o del grupo Ansaru, considerado una escisión de la secta.
Boko Haram, cuyo nombre significa en la lengua local "la educación no islámica es pecado", lucha por instaurar la "sharia", ley islámica", en el norte de Nigeria, con población en su mayoría musulmana, mientras que el sur del país es predominantemente cristiano.
Aún hay otros 8 ciudadanos franceses secuestrados en diferentes puntos del desierto del sahel.