Jonqueta Winbush sufrió un derrame cerebral mientras conducía y su coche, con sus dos hijos dentro, acabó sumergido en un lago de Texas (Estados Unidos). Gracias a la rápida intervención de su hijo de 12 años, que logró escapar junto a su hermana, y pedir ayuda a la policía, la conductora salvó la vida tras un angustioso rescate.

"¡Ella está convulsionando, ella se hundió, ella está en el agua!" gritaba desesperado el niño, con la ropa empapada, a un agente de policía. "¡Vamos sube!" le espeta el agente con el que se dirigió al lago, donde se encontraba sumergida la parte delantera del coche. Al llegar al lugar de los hechos el oficial le preguntó al niño: "¿Está ella ahí?", "Mi madre ¡Ayudadla!", responde angustiada la niña. Un hombre testigo de la angustiosa escena no duda en meterse al agua para rescatarla y a codazos logran romper una ventanilla.

Finalmente, y con la ayuda de otros oficiales, lograron sacar a la mujer en estado de inconsciencia debido al derrame cerebral sufrido. Consiguieron estabilizarla y, tras pasar tres semanas en la UCI con ventilación asistida, ya respira por sí sola.

Este rescate fue posible gracias a la ayuda altruista de Epifanio Munguia, testigo de la acción que manifestó: "Cuando estaba llegando a donde estaba ella, el coche empezó a hundirse", que no dudó en arriesgar su vida para salvar la de Winbush.