Un niño sirio de dos años es el primer refugiado que muere en el mar en 2016. Viajaba junto a otras 39 personas cuando el bote neumático chocó contra las rocas de una isla en el mar Egeo y se hundió. Varios pescadores encontraron el cuerpo del niño en el agua y lo trasladaron a un hospital, pero no se pudo hacer nada por su vida. En 2015, más de 3.700 personas murieron tratando de cruzar el Mediterráneo.