Desde primera hora de la mañana, la policía científica se afanaba en buscar indicios en el interior de la cabina desde la que Mohamed Lahouij Bouhlel causó la carnicería. Niza es una ciudad acordonada, desde primera hora había una presencia policial masiva en tierra y desde el mar, varias fragatas militares refuerzan la seguridad algunos de los 84 cuerpos permanecían aún tapados sobre el asfalto esta mañana y en el paseo numerosas miradas perdidas intentando buscar respuestas y silencio.
Todo lo contrario ocurría cuando el paseo estaba tomado por miles de franceses y turistas, alegres, festejando el 14 de julio con un espectacular castillo de fuegos artificiales. La enseña tricolor ondea con orgullo en señal de duelo, duelo también ha llevado a suspender la celebración del prestigioso Festival de Jazz de Niza. En las calles, Abrazos y lágrimas para intentar sobrellevar juntos el horror de lo sucedido.
Varios altares improvisados jalonan el Paseo de los Ingleses. Muchos ciudadanos han depositado velas, flores y besos en memoria de las víctimas. También hay muchos mensajes con los eternos valores que se festejaban.
Liberté, Egalité, Fraternité en un 14 de julio, esta vez trágico en la historia de Francia.