Aumenta la incertidumbre en torno a Al Golani

El nuevo Gobierno sirio disuelve el Parlamento y suspende la Constitución mientras dure la Transición

Esta medida se adopta tan solo cuatro días después de que los rebeldes derrocasen al régimen de Al Asad. Mientras, las tensiones entre facciones siguen escalando al norte del país.

Abu Mohammad Al-Golani, líder rebelde sirio

El nuevo Gobierno de Siria, liderado por Abu Mohamed Al Golani, ha decidido suspender de forma temporal la Constitución y el Parlamento. Concretamente, el tiempo de invalidez e inacción parlamentaria y constitucional será de tres meses, tal y como ha especificado la portavoz de Asuntos Políticos del nuevo Ejecutivo, Obaida Arnaout. Esta medida ha sido aprobada tan solo cuatro días después de que los rebeldes tomasen el control del país.

Sin embargo, y pese a tomar una decisión que podría parecer totalitarista, el nuevo Ejecutivo se afana por ser percibido como moderado, a pesar de que su grupo mayoritario, Hayat Tahrir Al Sham (HTS), en el pasado estuvo vinculado con Al Qaeda. De hecho, el propio Golani ha reconocido que "la gente está agotada por la guerra", la cual se ha extendido casi 14 años, y ha asegurado que "el país no está preparado para otra y no va a meterse en otra".

"Sus temores son innecesarios, si Dios quiere, el país será reconstruido", han sido las palabras que Golani ha utilizado para referirse a las minorías étnicas del país, cristianos y drusos, en un mensaje conciliador. Sin embargo, hay una facción en la que este mensaje no termina de funcionar, la kurda. De hecho, en las últimas horas han reprimido con disparos a la población que había salido a celebrar el triunfo de la rebelión en las calles de Raqqa y Hassaka ataviada con la nueva bandera de Siria. La permiten en las instituciones, pero no en la vía pública.

Sin embargo, continúan los combates en el norte del país entre la alianza liderada por kurdosirios, Fuerzas de Siria Democrática (FSD), y el grupo armado proturco, Ejército Nacional Sirio (SNA), los cuales han obligado a unas 80.000 personas a huir hacia el noreste del país árabe, ha informado este jueves Médicos Sin Fronteras (MSF) en un comunicado.

La ONG ha destacado que, según datos de las autoridades locales, estos desplazados ya se vieron obligados a marchar de la localidad de Afrín en 2018 y ahora se enfrentan a una relocalización en una zona con "importantes retos humanitarios e inseguridades", como es el área del noreste de Siria, concretamente Tabqa, Al Raqa y Al Hasakah.

Según la organización, "las necesidades humanitarias en la región son cada vez mayores" debido a los numerosos enfrentamientos y el retorno de personas al país. En concreto, MSF ha subrayado la situación en Tabqa, donde "las temperaturas descienden por debajo de los cero grados, y la gente no tiene mantas ni ropa de abrigo adecuada", además de no disponer de "letrinas, agua potable y alimentos" suficientes ni en buen estado. También ha insistido en el hecho de que "los servicios médicos existentes en algunas zonas que reciben a personas desplazadas se han visto rápidamente desbordados por la afluencia de gente".