Tras el fracaso de los demócratas en su intento por mantener el control del Senado en EEUU, el presidente Barack Obama ha tendido la mano a los republicanos para "trabajar juntos" durante los dos últimos años de su mandato, y dijo estar "deseando" escuchar sus ideas aunque sin olvidar sus "principios".

Obama ofreció una rueda de prensa en la Casa Blanca con motivo de los resultados electorales, que han supuesto una victoria abrumadora del Partido Republicano, que no sólo ha recuperado la Cámara Alta sino que además se ha hecho con un puñado de gobernaciones estatales que estaban en manos demócratas.

El presidente estadounidense instó al nuevo liderazgo del Congreso a lanzar su agenda política, después de duros años de obstrucción republicana a sus propuestas en la Cámara de Representantes y unos índices de polarización que han batido récords.

Obama reconoció que los republicanos "tuvieron una buena noche", en la que además ampliaron su mayoría en la cámara baja, y aseguró haber recibido el mensaje que los estadounidenses emitieron con su voto.

Los estadounidenses "esperan que la gente que ellos han elegido trabajen tan duro como ellos lo hacen a diario. Y yo tengo una responsabilidad única", agregó Obama, como un propósito de enmienda.