El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vitaly Churkin, ha solicitado a las autoridades ucranianas que no utilicen la fuerza contra los manifestantes prorrusos en el este del país y ha pedido a Kiev que "inicie un diálogo sincero".
En su comparecencia durante una reunión de urgencia celebrada por el Consejo de Seguridad de la ONU, Churkin ha asegurado que el "autoproclamado" Gobierno ucraniano cuenta con neonazis y antisemitas en sus filas.
"Los secuaces del Maidan --nombre con el que es conocido el movimiento popular de manifestaciones contra el derrocado presidente Viktor Yanukovich en Kiev-- deben dejar de atacar a su propia gente", ha dicho, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
En respuesta, el embajador ucraniano ante la ONU, Yuri Sergeyev, ha acusado a Moscú de crear una crisis "artificial" en el este del país. Horas antes, el presidente en funciones de Ucrania, Oleksander Turchinov, anunció el inicio de una operación militar a gran escala en el este del país y dio de plazo a los simpatizantes prorrusos para que abandonen los edificios institucionales que tienen bajo su control.
Sin embargo, y para desactivar la tensión en el este del país por la vía política, el presidente también ha ofrecido la posibilidad de incrementar las competencias y la autonomía de estas regiones, afines a Moscú en su mayoría, así como "la renovación de los Gobiernos locales".
Turchinov, que ha descrito a los asaltantes como "tropas terroristas coordinadas por la Federación Rusa", ha prometido responder con contundencia al enfrentamiento de esta mañana en el que un militar ucraniano, identificado por el presidente como el coronel Gennady Bilichenko, ha fallecido y otros cinco han resultado heridos.
También durante la jornada del domingo, el Departamento de Estado de Estados Unidos ha acusado a milicianos prorrusos de irrumpir en edificios gubernamentales de seis ciudades del este de Ucrania "en una operación coordinada y profesional muy similar a las llevadas a cabo en Crimea".
El Departamento de Estado ha manifestado que las operaciones estaban "planificadas" y ha dicho que ello queda demostrado con el hecho de que las mismas "tuvieran lugar de forma simultánea en varios lugares del este de Ucrania".
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