Los ministros de Exteriores de la Unión Europea han alcanzado un acuerdo político por el que respaldan suspender el acuerdo sobre la facilitación de expedición de visados que Bruselas firmó con Rusia en 2007, en el contexto de lainvasión de Ucraniapor parte de Moscú.
Aunque esto no supone una prohibición total de los visados, sí dificultará y encarecerá los trámites que los ciudadanos rusos tienen que llevar a cabo para obtener un permiso para estancias de 90 días en territorio comunitario.
El anuncio lo ha realizado este miércoles el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, durante la rueda de prensa posterior a la reunión informal de titulares de Exteriores de los Veintisiete celebrada en Praga. "Los Estados miembros consideran que no pueden seguir las cosas como si nada. Hemos acordado políticamente que se tiene que hacer algo", ha indicado el jefe de la diplomacia europea.
Según Borrell, con esta decisión, será "más difícil y llevará más tiempo" conseguir visados. "El número de visados se reducirá", ha avanzado, afirmando que existe un enfoque común en la UE que evitará que los ciudadanos rusos puedan aprovechar la falta de coordinación entre países para obtener permisos de viaje.
Con respecto a los visados ya emitidos, los Estados miembros han decidido encargar a la Comisión Europea que estudie la situación y ofrezca una serie de orientaciones para adoptar posibles restricciones. "Hay un entendimiento común de que también se deben abordar y esta situación necesita de un enfoque común", ha apuntado Borrell.