Las declaraciones de niño sirio de apenas 13 años, Kinan Masalmeh, han incendiado las redes. Como otros tanto miles de refugiados, el pequeño de ojos azules, junto a su familia, espera en Budapest para coger un tren que les aleje del terror que azota a sus país, las guerras y el terrorismo. Lleva días esperando en la estación de Keleti y su historia no tendría que ser diferente con respecto a la de otros inmigrantes que esperan agolpados en las puertas de la estación. Sin quererlo, su mensaje ha impactado al mundo, donde deja en evidencia a los gobiernos de los países occidentales y la actuación que están llevando a cabo. Resume en un breve pero directo mensaje, lo que debería hacer Europa frente a esta crisis migratoria y añade: "Ayudad a los sirios. Los sirios necesitamos ayuda ahora. Parad la guerra en Siria y no iremos a Europa. Sólo parad la guerra en Siria. Sólo eso".