Grandeza, amabilidad, cercanía, sabiduría... Son las virtudes que, según quienes le conocieron, aportaban a Mandela un tremendo magnetismo y carisma. Hemos entrevistado a algunos periodistas y políticos que tuvieron la suerte de conocerle en el clímax de su trayectoria. Todos coinciden en que el líder sudafricano poseía las claves de seducción del perfecto líder.