Esta medida ha coincidido también con el desalojo del estadio de la ciudad en el que se iba a celebrar el partido amistoso entre las selecciones de Alemania y Holanda. El estadio tiene capacidad para 45.000 personas y en el momento del desalojo no estaba al completo. Estaba previsto que Merkel asistiera a este encuentro. Un paquete sospechoso ha sido la causa por la que se ha decidido vaciar el complejo.