La reacción en las calles de Túnez ha sido inmediata. Decenas de personas han salido a las calles con velas para mostrar su rechazo a los atentados y para reivindicar de forma pacífica la democracia del país. Temen que este atentado suponga un paso atrás en el proceso democrático y dañe también a la industria del Turismo.