La tradición dice que es un cargo vitalicio, por eso aún nos cuesta creer que Benedicto haya renunciado. Pero con 85 años ha tomado la decisión que menos esperábamos.
Dentro de la Iglesia española dicen que es un gesto que le honra. Pero entre sus fieles, hay quién duda de que el cansancio sea el único motivo.
Apenas hace año y medio visitó España, uno de sus países predilectos para sus peregrinaciones, era su sexta visita, la tercera como como Papa. Ya hay quien ve en nuestro país, la cuna del futuro Papa, el que más suena Rouco Varela. Pero para saber su procedencia aún debemos esperar al mes de marzo.