El campamento de Idomeni ha vivido nuevamente horas de tensión a causa de un rumor sobre la inminente apertura de la frontera griega con Macedonia, lo que hizo que centenares de inmigrantes y refugiados se agolparan ante el puesto limítrofe en espera de poder cruzar. La Policía ha tardado horas en normalizar la situación y en desmentir el rumor: la frontera permanecería cerrada y aquel que intentase cruzarla estaba poniendo en peligro su vida.