La explosión ha ocurrido en la zona de Banu Chungi, en la ciudad de Dera Ismail Khan. Según la Policía, una bomba, compuesta por diez kilos de explosivo y escondida en una zona de basuras cercana a la mezquita de Karim Khan, estalló al paso de una pequeña procesión.
Hay siete muertos, cuatro de ellos niños, y una veintena de heridos. La Policía ha acordonado el lugar de la explosión, que ocurrió pese a que la comitiva contaba con medidas extras de seguridad, en vista de los ataques cometidos en los últimos días contra los chiíes.
Este sábado es el noveno día del mes de Muharram, una importante jornada festiva para la secta islámica chií, que cuenta con alrededor de una quinta parte de la población paquistaní.
En el noveno y décimo día de Muharram, los seguidores de la corriente chií, considerada herética por algunos radicales suníes, recuerdan el martirio del imán Hussein, nieto de Mahoma y uno de los fundadores del chiísmo.
Los chiíes suelen acudir a diversas concentraciones por esta celebración, pero han sido objetivo frecuente de atentados sectarios, como las tres explosiones ocurridas el pasado 21 de noviembre que dejaron 27 muertos en las ciudades de Rawalpindi y Karachi.