Un mes después del paso del tifón Haiyan, en Filipinas aún siguen trabajando para recuperar cadáveres y enterrarlos. Más de 1.700 personas siguen desaparecidas y la cifra de muertos ronda los 5.800. Las prioridades siguen siendo refugio, agua, atención sanitaria y suministros básicos para el hogar. Más de 93.000 filipinos aún permanecen en los centros de evacuación.