Irak se ha convertido en una nueva Siria con un país fragmentado en tres zonas en guerra. Los yihadistas suníes de ISIS controlan el noroeste, los kurdos el este y el gobierno chií el centro y el sur. Los islamistas quieren hacerse con el control del país y ampliar su emirato conquistando también Siria. Un sueño de terror que intentan lograr con ejecuciones diarias, algunas con niños armados como testigos.