Alexis Tsipras ha viajado a Moscú para buscar financiación alternativa en un momento crítico de las negociaciones con sus socios europeos. Unas conversaciones entre Tsipras y Putin que son vistas con mucho recelo por la Unión Europea. Alemania ha calificado de "tontería" la reclamación griega de 279.000 millones de euros por la ocupación nazi.