Unas maniobras de entrenamiento militar en la provincia afgana de Laghman el 2 de julio de 2013 acabaron con la vida de Hilda I. Clayton, una fotógrafa estadounidense que hacía fotografías de soldados.

Los ejercicios militares eran con fuego real y un accidente provocó la tragedia. Hilda murió y también otras cuatro personas. Ahora, cuatro años después, la familia de la fotógrafa ha dado su consentimiento para que las imágenes de aquellos fatales instantes acaben viendo la luz.

Una de las últimas instantáneas tomadas por una fotógrafa de EEUU