Los gobiernos de la Unión Europea activarán su plan para poner en marcha el fondo europeo de recuperación sin Hungría y Polonia si los gobiernos de estos dos países no dan "señales claras" de su voluntad para levantar el veto al paquete presupuestario en las próximas horas y, como muy tarde, este martes.
Así de rotundos se muestra en Bruselas, para que ambos países finalmente accedan a desbloquear el presupuesto de la UE para los próximos siete años y el plan anticrisis de 750.000 millones de euros.
De no ocurrir pronto, hablan de un plazo de 24 horas, los Estados miembros "probablemente" activen una alternativa para seguir adelante sin ellos. "Necesitamos tener señales claras de Hungría y Polonia hoy o mañana a más tardar, si no las tenemos probablemente tendremos que pasar al escenario 'B'", han señalado las mismas fuentes.
Hungría y Polonia siguen rechazando el mecanismo que vincula el desembolso de ayudas europeas y el respeto al Estado de derecho por considerar que es arbitrario y, como protesta, se niegan a ratificar el Marco Financiero Plurianual (MFP) y los 750.000 millones para relanzar la economía.
La Comisión Europea está ya explorando las opciones legales que permitirían sacar adelante el fondo europeo sin el visto bueno de estas dos capitales, entre ellas un sistema de avales para que Bruselas pueda emitir deuda similar al instrumento contra el paro (SURE), un acuerdo intergubernamental como el que sostiene el MEDE o un sistema de "cooperación reforzada" que permite dejar de lado a los países que no quieran participar.
De no levantar su veto, se podría avanzar con respecto al fondo de recuperación pero no con el presupuesto comunitario, que seguiría bloqueado. En un escenario así, la UE se vería obligada a prorrogar el presupuesto de 2020 y aplicar un sistema en el que cada mes sólo se podrá gastar una duodécima parte de las cuentas de este año.