Según se recupera, Erwin Tumirí, el técnico del vuelo, va recuperando la memoria: "Poco a poco me voy acordando porque todo esto fue como un sueño, como una pesadilla".
Es el primer relato detallado de uno de los seis supervivientes del accidente aéreo de Medellín. Momentos antes del impacto, todo parecía ir bien, en lo que era una maniobra de aterrizaje común.
"Nadie sabía que estaba pasando. Todos creíamos que íbamos a aterrizar porque el piloto había anunciado que nos sentáramos, que nos abrocháramos los cinturones", asegura Tumirí.
El piloto no informó a los pasajeros de que se encontraban en una situación de emergencia, tampoco a Erwin. Según él, nadie le alertó de la falta de combustible. "Vibró el avión, se apagaron las luces y se encendieron las de emergencia. Fue entonces, cuando empezamos a tener malas sensaciones".
Calcula que fueron dos minutos de descenso brusco, después perdió la consciencia. "Yo estaba bocabajo. Me levanté y caminé como entre sueños. A la única que cogí fue a Ximena, que estaba atrapada". Al poco tiempo, llegaron los equipos de rescate, que le encontraron desconcertado.