Se fue de vacaciones y al regresar encontró su casa reducida a escombros. Es la pesadilla de Susan Hodgson, una mujer de Atlanta, en Estados Unidos, cuya vivienda fue demolida por error durante su ausencia. "Me han dejado con este desastre", lamenta.

Una vecina que vio a los operarios la llamó para preguntarle si los había contratado ella para demoler la vivienda. "Yo le dije 'no' y me dijo: 'Pues acaban de demoler la casa entera'", cuenta.

A pesar de la buena fe de su vecina, cuando se acercó a los trabajadores para informarles de la equivocación, ellos le dijeron que se metiera en sus asuntos. Un familiar de Susan se acercó entonces al lugar: ya no quedaba ni una piedra en pie y, cuando les pidió el permiso, se dieron cuenta del fallo: "Sacó el permiso y dijo: 'Oh, me he equivocado de dirección'", denuncia la afectada.

Según su testimonio, los operarios recogieron su equipo y abandonaron el lugar, sin pedir perdón ni dar explicación alguna. "Es difícil de creer que alguien piense que puede venir, tirarlo todo e irse", lamenta Susan, que sigue buscando respuestas. Por su parte, la empresa responsable ahora dice que está investigando los hechos.