Preparados todos los asistentes de la manifestación de Barcelona, la más institucional de los últimos años: "Es un nuevo éxito de convocatoria a lo largo de todo el país y por lo tanto una señal más del compromiso persistente de este pueblo con su libertad" ha dicho Junqueras.
Aunque esta vez sí ha acudido la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha preferido evitar hacerse la foto con los líderes independentistas: "Salimos a la calle para decir que hace falta desbloquear la situación y que se haga un referéndum donde todo el mundo pueda participar".
El que este año sí ha acudido ha sido el expresident Artur Mas: "Este año sí, por fin puedo participar en una manifestación así. Según mi criterio no convenía que yo participara en manifestaciones de este tipo pero este año liberado como estoy de la presidencia del país y del Gobierno estoy donde me hubiera querido estar en los últimos años".
Otra de las figuras que han participado ha sido la presidenta del Parlament, que ha justificado su asistencia por sus ideales: "No sería coherente con mis convicciones si durante tres años he sido presidenta de la asamblea y ahora no venir a esta manifestación".
Una manifestación con un mensaje claro, la independencia, y sin billete de vuelta, dicen: "No hay vuelta a atrás, no hay retorno, solo queremos una ruptura clara y precisa con un referendum de autodenominación" ha dicho Gabriela Serra.
Y romper con el Estado español, según cuentan, con un objetivo: "Proyectarse al mundo y explicar las bondades de este proceso, que insisto no es contra España, sino para dar valor y fortaleza e ilusión a las generaciones que vendrán". Ambiente festivo en una multitudinaria jornada, con marcada presencia política, para pedir por quinto año consecutivo la independencia de Cataluña.