El pequeño Adou, el niño de 8 años que fue introducido en una maleta para entrar ilegalmente en España por la frontera de Ceuta el pasado 7 de mayo, ha conseguido un permiso temporal para residir en España durante un año.
La Secretaría General de Inmigración y Emigración del Ministerio de Empleo ha concedido una autorización individual por el plazo de un año de residencia temporal por circunstancias excepcionales.
Esta notificación oficial ha sido hoy trasladada a la Oficina de Extranjería de Ceuta que, a su vez, ha enviado la misma al director del centro de acogida del Mediterráneo donde permanece actualmente el menor.
Gracias a esta autorización se permitirá que el niño pueda reunirse con su madre, aunque antes de dicho encuentro es necesario conocer los resultados de las pruebas de ADN que se les ha practicado tanto al padre como a la madre para ver si son sus progenitores.