Un juzgado de Valencia investiga una presunta trama de corrupción en la empresa pública Imelsa, dependiente de la corporación provincial, tras aportar EU, que fue el partido que presentó la denuncia inicial, más de diez horas de grabaciones realizadas por el exgerente Marcos Benavent, hombre de confianza de Rus y uno de los presuntos cabecillas de la trama.

En algunas de esas grabaciones, Alfonso Rus aparece presuntamente contando dinero que podría provenir del cobro de comisiones o haciendo comentarios que el PP considera "poco decorosos" para un dirigente político, lo que motivó que fuera apartado del partido, pese a no estar imputado en ninguna causa judicial.

El decreto de presidencia de la Diputación sobre cesión temporal de funciones, que ha entrado en vigor este martes, fija un plazo de 10 días, que coincide con el final de la campaña electoral. Esa delegación de funciones impedirá también a Rus presidir el último pleno de la Diputación de la presente legislatura, convocado para el 18 de mayo.

Tras estar diez días fuera de la actividad política, Alfonso Rus tomará de nuevo las riendas de la Diputación de Valencia hasta la constitución de la nueva corporación resultante de los comicios, prevista para finales de junio o primeros días de julio.

El propio Rus ya anunció, cuando empezaron a difundirse las grabaciones en las que supuestamente aparecía constando dinero, que se trataba de un "complot" y que el día 25 de mayo comparecería en una rueda de prensa para explicarse, ya que considera que todo lo publicado hasta entonces era "mentira total".