Galicia no celebrará las elecciones el 5 de abril, una decisión acordada con el resto de partidos políticos ante la situación provocada por el coronavirus. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, lo ha anunciado este lunes. Se suspende esa fecha, pero "yo creo que ahora mismo no podemos establecer una fecha cierta" para la celebración de los comicios.
Según ha apuntado, no se podrán celebrar nunca mientras esté en vigor el estado de alarma decretado por el Gobierno ni el de alerta sanitaria declarado por la Xunta. Feijóo asegura que se deja sin efecto el 5 de abril y que su deseo es retomar en el punto en el que se han dejado.
Antes, el País Vasco había anunciado la decisión de aplazar las elecciones. El lehendakari, Iñigo Urkullu, se había reunido con los líderes de los principales partidos políticos y les había trasladado que debido a la excepcionalidad de la situación, se aplazaban los comicios.
El lehendakari ha explicado que todos los partidos "han estado de acuerdo" con esta decisión
Tras esta reunión, el líder del Ejecutivo vasco ha asegurado en una comparecencia ante los medios que "todas las fuerzas políticas vascas han estado de acuerdo" con la decisión de aplazar las elecciones autonómicas porque "no pueden celebrarse con las debidas garantías, tanto para la salud pública como para el ejercicio del derecho de sufragio".
"Hemos constatado la imposibilidad de realizar, en condiciones mínimas razonables, la campaña electoral y la celebración de la votación en las fechas previstas. Hemos adoptado, de común acuerdo, las prevenciones necesarias para garantizar que las elecciones se celebren tan pronto como la mitigación de la situación de emergencia sanitaria lo permita", ha destacado.
En consecuencia, ha dejado sin efecto, mediante Decreto del Lehendakari, la convocatoria de Elecciones al Parlamento Vasco del próximo 5 de abril. Esta decisión se adoptará y publicará en el Boletín Oficial del País Vasco antes del inicio de la campaña electoral este jueves a las 00:00 horas.
El País Vasco ya declaró el estado de alerta sanitaria el pasado viernes. Y el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, admitió que era "poco razonable" celebrar las elecciones en Euskadi y Galicia.