Con silencio. Así ha respondido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a la pregunta que el jefe de su partido, Pablo Casado, le ha hecho durante la inauguración del Hospital Isabel Zendal, la joya de la corona de la gestión de la madrileña frente a la pandemia: "¿Aquí hay quirófanos?".
Ante el silencio de la presidenta, al rescate de Ayuso ha acudido el director general de Infraestructuras Sanitarias, Alejo Joaquín Miranda de Larra. "Aquí hay salas de procedimiento", ha dicho, lo que los sanitarios llaman "salas de curas".
La pregunta de Casado se producía justo después de que Ayuso, en un corrillo en el que también participaba el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, explicara que el hospital de emergencias también serviría en caso de un accidente aéreo.
El hospital de pandemias de Ayuso se ha revestido de polémica desde el principio. Los críticos denuncian que la inversión de 100 millones de euros en la construcción de un hospital que no tiene pacientes y para el que no hay suficientes sanitarios debería haberse destinado a reforzar la atención primaria.
Protestas en la inauguración
Decenas de sanitarios han protestado frente a las puertas del nuevo hospital de pandemias Isabel Zendal de Madrid durante el acto de inauguración presidido por Isabel Díaz Ayuso.
Los manifestantes han portado pancartas contra el Gobierno de la Comunidad de Madrid y han recriminado que el acto de la presidenta "solo sirve para que se haga una foto", ya que, denuncian, el hospital no puede estar operativo porque no hay profesionales.
Los sanitarios, convocados por la Asociación Madrileña de Enfermería (AME), el Movimiento Asambleario de Trabajadores-as de Sanidad (MATS), SUMMAT y Juntas x la Pública, han calificado de "chapuza" el nuevo centro y aseguran que lo que "hacen falta son rastreadores y reforzar la atención primaria".
"Estamos aquí porque teníamos 100 millones de euros y en vez de gastarlos en reforzar la atención primaria, contratar rastreadoras, que es lo que hace falta para acabar con una pandemia, hemos decidido construir otro hospital más, teniendo 699 camas cerradas desde el principio. 699 no se han abierto en ningún momento", ha criticado Alma Blanco, enfermera y miembro del MATS.
"¿Para qué queremos 240 camas en un hospital nuevo?", se ha preguntado la sanitaria, que ha apuntado que les parece "un malgasto de dinero": "Es absurdo, no tenemos personal. Lo que descongestiona un hospital es una buena atención primaria".