La limitación del precio del alquiler ya es una realidad. El Gobierno ha presentado la herramienta que lo hará posible a partir de este mismo marzo, si bien será necesario que lo aplique cada comunidad autónoma, declarando estas zonas como tensionadas. Algo que en las regiones gobernadas por el PP no parece que vaya a ocurrir.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya ha rechazado de entrada la idea, asegurando que "los ciudadanos tienen derecho a poner su vivienda al precio que necesiten".
En caso de aplicarse en regiones como Madrid, un estudio de 40 metros que ahora mismo se anuncia por 1.100 euros al mes quedaría en un máximo en 638 euros si se aplicara el Índice de Precios del Ministerio.
Cataluña aplicará la referencia de precios. Así, en Barcelona, por ejemplo, una vivienda de un bloque de Sants que ahora se anuncia por 1.828 debería alquilarse como máximo a la mitad: 952 euros al mes.
No obstante, para aplicar la referencia de precios tendrán que tenerse en cuenta diversos factores. Solo se aplicará en contratos nuevos y si se da una de siguientes condiciones: que el arrendador sea un gran propietario, o que la vivienda sea nueva en el mercado del alquiler; es decir, que no haya estado alquilada con anterioridad.
Para el arrendador que sea pequeño propietario no habrá grandes cambios. Su referencia del precio no será este índice, sino el último contrato de alquiler.