La conocida como 'ley de solo sí es sí' ya ha sido aprobada en el Congreso de los Diputados. Esta nueva norma supone un cambio drástico en el tratamiento de los delitos sexuales, y ha sido impulsada por el Ministerio de Igualdad con el eje principal de la eliminación del 'abuso sexual' en el Código Penal. Un hito que para algunos partidos políticos se hizo flagrante cambiar tras la violación grupal de 'La Manada' en San Fermín de 2016.
En el momento en el que entre en vigor, todo acto sexual sin consentimiento expreso se va a considerar una agresión sexual, evadiendo a las víctimas de justificar su resistencia o que ha habido penetración para demostrar que han sido agredidas sexualmente.
El silencio o la pasividad de las víctimas no se considerará un 'sí'. Por este motivo, los casos como la violación grupal a una joven en Pamplona serán castigados, por tanto, como agresión y no abuso sexual. En una primera sentencia por parte del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, los cinco agresores fueron condenados por abuso y no por agresión sexual porque no había habido violencia ni intimidación contra la víctima.
Una condena que, una vez que entre en vigor esta ley, no se podría dar, ya que el abuso pasará a ser agresión. El Gobierno insiste: la Ley Orgánica de Garantías de la Libertad Sexual no tiene objetivo punitivo, sino ampliar el espectro de delitos en el ámbito sexual. Por este motivo, las penas no son mayores.
Así, detalla el escrito, la agresión sexual sin penetración pasa a estar penada de 1 a 4 años y con penetración de 4 a 12 años. También pasa a ser delito el acoso callejero, que debe ser reiterado, y está penado con trabajos para la comunidad.