A partir de este sábado, 26 de junio, España comenzará a relajar el uso obligatorio de mascarilla en espacios al aire libre. Una iniciativa anunciada el pasado viernes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fruto de la evolución favorable de la situación epidemiológica de España y del avanzado ritmo en la campaña de vacunación del país contra el coronavirus. Estos factores han llevado al Consejo Interterritorial de Salud a acordar este miércoles de qué manera se flexibilizará su uso.
Sanidad y las comunidades han decidido de esta manera que la mascarilla no sea obligatoria en espacios al aire libre. Eso sí, siempre y cuando se pueda mantener una distancia interpersonal de al menos 1,5 metros entre personas no convivientes. En esta línea, su uso sí será necesario en espacios cerrados abiertos al público, tales como bibliotecas o supermercados, según los ejemplos referidos a laSexta.
El uso de la mascarilla también será de obligado cumplimiento en los distintos medios de transporte públicos. A destacar, autobuses, metro, transporte aéreo y ferroviario, teleférico o barcos -aunque en este punto se establecen excepciones: no será necesaria en camarotes de carácter privado o en espacios exteriores de las embarcaciones donde sí se pueda garantizar 1,5 metros de distancia interpersonal-.
El pacto alcanzado por el Ministerio y las autonomías también afecta a la utilización de las mascarillas en eventos multitudinarios, donde será o no obligatoria en base a dos supuestos. Deberá ponerse en esos eventos en los que, aunque se celebren en espacios al aire libre, se puedan producir aglomeraciones y los asistentes estén de pie. En cambio, no será indispensable su empleo en los eventos en los que las personas puedan ocupar asientos separados entre sí por, al menos, 1,5 metros de distancia.
La mascarilla lleva siendo obligatoria desde finales de mayo de 2020
Esta nueva medida también tiene en cuenta la situación en las residencias. Allí, las mascarillas no serán obligatorias para residentes -personas mayores o con diversidad funcional- ni tampoco para personas en dependencias destinadas a trabajadores esenciales, siempre que en ambos casos el porcentaje de personas vacunadas con pauta completa supere el 80%. En cambio, sí serán obligatorias para visitas y para trabajadores de las instituciones para la atención de personas mayores o con diversidad funcional.
Desde el Consejo Interterritorial se ha querido recordar que en todos estos casos, no obstante, habrá que llevar obligatoriamente una mascarilla encima por si resultara ser necesaria en cualquiera de las circunstancias actuales o a determinar en el futuro. Este objeto lleva acompañando a la sociedad española desde el 21 de mayo de 2020. Con su implementación, el Gobierno esperaba reducir la propagación de contagios que por entonces se estaba registrando en nuestro país, que salía recientemente de un duro confinamiento para atajar de forma directa los estragos más graves de la crisis sanitaria.
"La mascarilla ha sido muy útil, ahora sabemos cómo parar el virus"
"Si miramos atrás, uno de los elementos que más hemos asociado a la pandemia y que mayor impacto ha tenido es el uso obligatorio de las mascarillas", ha recordado precisamente la ministra de Sanidad, Carolina Darias, en una rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo Interterritorial. Durante su intervención, ha recordado que "se trata de una medida que ha sido muy útil para parar la transmisión. Ahora sabemos como funciona el virus, ya sabemos como pararlo". Porque más de un año después desde que se hizo efectivo su uso obligatorio, la situación epidemiológica en España ha cambiado notablemente y a favor.
Este miércoles se han alcanzado los 15 millones de personas vacunadas contra el coronavirus con pauta completa y el 50% de la población tiene ya al menos una dosis. Unos datos que ha querido poner en valor la ministra, advirtiendo de que "en estos momentos estamos en el camino a la nueva normalidad", y ha añadido: "No solo en incidencia acumulada, sino en datos de hospitales y de UCI. Todos los indicadores nos dicen que vamos en el camino adecuado". Aunque Darias ha matizado que "estamos ante una medida de flexibilización, progresiva, gradual y prudente", ha querido recordar que aún "tenemos que estar vigilante con el virus".