Mariano Rajoy no era el primer candidato para José María Aznar y de haber aceptado la proposición Rodrigo Rato, hoy sería el el líder del Partido Popular y posiblemente el Presidente del Gobierno.

El expresidente lo reconoce en "Memorias I" (Planeta), el primer volumen de sus memorias que se presentará el 26 de noviembre en Madrid y en el que explica algunas de sus decisiones más controvertidas durante sus ocho años de Gobierno.

Asegura que su ''sucesor natural'' era Rato, pero tras rechazar la prpuesta dos veces, cuando quiso ser candidato, en 2003, Aznar le recriminó que ya había dicho dos veces ''no''.

En noviembre de 2002, Aznar ya había escrito el nombre en su cuaderno azul, que se conocería casi un año más tarde, en agosto de 2003. Se lo comunicó a Rajoy y le pidió que no dijera nada a nadie, ''ni siquiera a su padre''.

En un viaje a República Dominicana, el expresidente sufrió un accidente grave. Entonces, llamo al Rey Juan Carlos y le pidió que, de sucederle algo, en el cuaderno azul estaba el nombre de la persona que, creía, debía encargarse de la situación.