Esto es lo que el ministro Montoro dijo en sede parlamentaria el pasado mes de enero. Nadie que estuviera investigado por fraude fiscal podía acogerse a la amnistía fiscal. Además de la fórmula legal, utilizó la fórmula de titular periodístico: "La regularización no encubre el delito". Incluso ha despreciado a quien se lo ha reprochado: "Sus intervenciones son una empanada mental"

Pero aquí está la prueba. Esta es la declaración de Bárcenas: 11 millones blanqueados, y un pago de un millón. A Montoro se le ha colado Bárcenas, que está imputado por delito fiscal. Los expertos dicen que es una jugada maestra: "Al acogerse a la amnistía, Bárcenas impide que se le impute por delito fiscal", según Carlos Cruzado, presidente del Sindicato de Técnicos de Hacienda, (GESTHA).

Volvamos al ministro Montoro, que ayer tarde, repetía que ahora hay que investigar: "Esa será la cuestión que tenga que dilucidar la Justicia".

Pero los técnicos de Hacienda, es decir, esos que tienen que investigar a los que se refiere Montoro, ya lo ven difícil, porque son ellos, es decir Hacienda, quien tiene que demostrar que ese dinero de Bárcenas es ilícito. Es decir, que Montoro pierde la iniciativa. Bárcenas se le ha colado, ahora es él quien debe demostrar cómo sacarlo.