Es la imagen de la resistencia, la del hombre que pasó más de cinco horas a seis metros de altura mientras intentaba evitar ser devuelto a Marruecos. “He estado cinco horas en ese poste, han hecho de todo para que bajara. Han traído máquinas, han intentado subirse, hasta han sacudido el poste, pero no me he bajado”, aseguraba tras su agonía.

El goteo de inmigrantes ha sido incesante en las últimas semanas. Febrero y marzo registran continuos intentos de asalto. El 24 de febrero se produjo el primer intento de entrada masiva de inmigrantes, en el que 100 sin papeles se consiguieron acceder a Melilla. Cuatro días después, Mirelle, la primera mujer que logró saltar la valla, conseguía entrar en España tras cuatro intentos fallidos. Como ella, otros 200 sin papeles.

Hace diez días, 500 inmigrantes consiguieron entrar en Melilla. Cada año se registran datos similares. En lo que llevamos de año, ha habido casi 3.000 intentos de salto de la valla, de los cuales lo han conseguido 1.092 inmigrantes. Bruselas buscará una posible solución a este drama.