El director del centro penitenciario de Estremera (Madrid) ha tomado la decisión administrativa de intervenir las comunicaciones del excomisario José Manuel Villarejo por el riesgo del uso fraudulento de las mismas y la posibilidad de que este interno filtre datos que pongan en riesgo la seguridad del Estado, han informado a Europa Press fuentes de Instituciones Penitenciarias.
Esta intervención ha sido comunicada a Villarejo, que se encuentra preso desde noviembre de 2017, y al juez de la Audiencia Nacional Diego de Egea, encargado de la instrucción de la 'operación Tándem', según ha adelantado el diario La Vanguardia.
La medida tiene una duración de seis meses y después puede ser revisada. Desde su entrada en prisión se han intensificado la difusión de grabaciones atribuidas a Villarejo y que afectan a diferentes personalidades del Estado, entre ellos el Rey Juan Carlos, debido a las confidencias de su examiga Corinna zu Sayn-Wittgenstein.
También han aparecido audios de conversaciones en un restaurante de la ministra de Justicia, Dolores Delgado, o de la exsecretaria general del Partido Popular María Dolores de Cospedal.
La Audiencia Nacional mantiene abierta una investigación por el uso de fondos reservados con el cometido de que Villarejo captara al chófer de Bárcenas como confidente para intervenir documentación del extesorero del PP, al que también grabó en un restaurante el excomisario de la Policía.
Las intervenciones de los presos preventivos pueden ser acordadas por el juez que atiende a la instrucción o, como ha ocurrido en este caso, por decisión administrativa del director del centro penitenciario, para lo que no necesita autorización previa del primero, según explican las fuentes citadas.
La decisión del director de Estremera se produce después de que el excomisario haya vuelto a solicitar su puesta en libertad alegando problemas de salud y una vez que el juez De Egea, que baraja autorizar la excarcelación, anunciara su renuncia a la Audiencia Nacional por "motivos personales".