Unos minutos antes de que arrancara la manifestación para celebrar el Día Internacional de la Mujer en Madrid, el candidato socialista, Antonio Miguel Carmona, se ha referido a las palabras de Esperanza Aguirre, quien ha advertido al PP de que si la aparta de la Presidencia del PP de Madrid y nombra una gestora automáticamente dejará de ser candidata.

Aguirre ha reconocido que la secretaria general del PP, María Dolores Cospedal, le pidió que dejara de ser presidenta del partido en Madrid para ser candidata, algo a lo que ella se negó en rotundo. Todas estas maniobras demuestran, según Carmona, que el presidente de los populares, Mariano Rajoy, "lo que quería era el sillón del PP en Madrid, y no el Ayuntamiento.

Y por eso envió a Aguirre al sillón de la oposición". Y también demuestra, ha continuado, que a la propia Aguirre "no le interesa Madrid ni los madrileños, le interesa la silla del PP de Madrid y todo el entramado que hay" en ese partido. Bajo su punto de vista, entre Aguirre, el presidente Ignacio González o el exconsejero Francisco Granados "no se altera el producto", unos y otros le dan "igual".

Carmona ha recordado, además, que este sabado invitó a Aguirre a manifestarse en defensa de la mujer. "Y no la veo por ningún lado", ha apuntado. Ha querido mostrar su "apoyo" a todas las mujeres en un día como hoy, en el que también deben participar los hombres, ha dicho.

Y ha aprovechado para afirmar que en su candidatura al Ayuntamiento el segundo puesto lo ocupará una mujer, que será "más competente y formada" que cualquier número uno que proponga el PP. "Madrid se va a escribir con M de mujer", ha prometido, ya que no sólo van a tener una presencia destacada en su candidatura, sino también en los puestos orgánicos si es elegido alcalde.