"No doy ni una sola batalla por perdida", ha afirmado Carmona en una entrevista en la Ser tras haber sido destituido como portavoz del grupo municipal socialista por una decisión "errónea", según ha recalcado, de la Ejecutiva federal, que quería desprenderse de él desde febrero cuando Tomás Gómez fue cesado como secretario general del PSM.
Carmona, que ya ha dicho que no renunciará a su acta de concejal, ha señalado que la nueva dirigente de los socialistas madrileños, Sara Hernández, está "de paso" y que hay "dos o tres" miembros de su ejecutiva que ya quieren dejarla y así se lo han comunicado tanto a ella como a Carmona, "incluso por escrito".
"Aquí quien manda es la Ejecutiva federal", ha insistido el concejal, que ha recalcado que los militantes deben recuperar el partido y que su destitución es un asunto exclusivamente interno por no coincidir con el secretario general, Pedro Sánchez.
Ha asegurado que de los "seis o siete" ediles de los nueve que integran el grupo municipal socialista no están de acuerdo con su destitución, aunque al final cinco han decidido acatar la resolución del partido. Para Carmona, que no ha descartado ser alcalde de Madrid, el argumento de los malos resultados es "falaz, falso y, desde luego, cobarde", puesto que el PSOE ha conseguido en Madrid "uno de los mejores resultados de las grandes ciudades".