La propuesta de PSOE y Unidas Podemos para reformar la ley que regula la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha protagonizado la sesión de control al Gobierno. Pablo Casado ha exigido a Pedro Sánchez que "expulse" a la formación morada de este proceso porque "es un partido imputado que arremete contra el juez" y le ha pedido que cese a Pablo Iglesias. Mientras su secretario general, Teodoro García Egea, ha asegurado que el objetivo del Ejecutivo es "cambiar la ley para elegir al juez que juzgue" al líder de Podemos.
Ante estas declaraciones, Sánchez ha insistido en defender al vicepresidente y mostrar su confianza hacia él, como ya hiciera después de que la Audiencia Nacional solicitara su imputación. "El vicepresidente y todo mi Gobierno tienen mi confianza. Este Gobierno, a diferencia de los suyos, no tiene a nadie condenado, procesado ni imputado", ha señalado.
En la misma línea que Casado se ha pronunciado Santiago Abascal, que ha tildado la propuesta de "ataque a la justicia" durante su intervención. "No me interesan ninguna de sus respuestas después del ataque brutal a la justicia y de las faltas de respeto al rey", ha indicado el líder de Vox desde su escaño.
Este Gobierno, a diferencia de los suyos, no tiene a nadie condenado, procesado ni imputado"
Una intervención que, a juicio del presidente del Gobierno, se ha convertido en "un monólogo". "Usted no respeta las sesiones, hace un monólogo. Ya sabemos la concepción de la democracia de Vox, habría que ilegalizar a quien no piensa como usted", ha señalado en referencia a Abascal. También ha aprovechado para lanzar un mensaje hacia la bancada del PP: "Fíjese lo que está haciendo, señor Casado, abriendo la puerta a la ultraderecha. Le insto a que recapacite y centre a su partido".
Inés Arrimadas, por su parte, ha asegurado que Ciudadanos llevará la reforma para la renovación del CGPJ a Europa y ha pedido al Gobierno que "rectifique" porque esto "daña la imagen de España". En este sentido, ha destacado que "solo hay una cosa peor que repartirse los jueces por amplísima mayoría, repartírselos entre los socios de Gobierno, en su caso entre golpistas y filoterroristas".
Se reparten los jueces entre los socios de Gobierno, en su caso entre golpistas y filoterroristas"
Asimismo, la líder de Ciudadanos ha acusado al Ejecutivo de "acercar a etarras y atacar al rey" en plena crisis sanitaria por la pandemia y ha señalado a Iglesias, apuntando que "es la primera vez en democracia que un vicepresidente se encuentra al borde de la imputación".
El secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha acusado al Ejecutivo de querer "cambiar la ley para elegir al juez que juzgue" a Pablo Iglesias por el caso Dina. Además, ha cuestionado si en la formación morada hay "alguien sin imputar o condenar". Ante esto, el vicepresidente le ha aconsejado consultar con los juristas de su partido para que le digan que en "España hay separación de poderes", a pesar de que el PP "dijera que iba a controlar el Supremo por detrás".
El tono se ha elevado un poco más con la intervención de Macarena Olona, que ha acusado al líder de la formación morada de ser "un auténtico matón y practicar el matonismo político", haciendo referencia a lasamenazas que ha denunciado haber recibido el juez Manuel García-Castellón, el magistrado que ha pedido al Supremo la imputación de Iglesias. Ante estas declaraciones, Iglesias ha asegurado que su partido condena todas las amenazas, pero ha recordado que "varios analistas concluyen que las cuentas que acosan al magistrado están vinculadas a Vox y a la extrema derecha".
Este miércoles hemos vuelto a asistir a una sesión de control al Gobierno muy bronca y con graves acusaciones entre los distintos grupos. El tema que ha protagonizado las intervenciones de hoy ha sido la propuesta del Gobierno parareformar la ley que regula la renovación del CGPJ, con el fin de modificar las mayorías parlamentarias necesarias para renovarlo y poner fin así al bloqueo.
Otro de los momentos más bronco es ha sido cuando la portavoz del PP, Cuca Gamarra, ha interpelado a la vicepresidenta Carmen Calvo: "Solo se dedican a prestar amparo a Iglesias. Es curioso que siendo tan feminista respalde el machismo de Iglesias en el caso Dina", algo que ha provocado mucho revuelo en el hemiciclo.
"Iglesias dice que no espera ser imputado, pero presiona al Supremo. Quieren suplantar el Estado de Derecho con un régimen populista", y habla de "instintos autoritarios de su Gobierno". A su juicio, "imponen estado de alarma desproporcionado" y habla de "despotismo".
Calvo le ha dicho que le recuerda a la anterior portavoz parlamentaria del PP, Cayetana Álvarez de Toledo: "El cumplimiento de las normas le llaman secuestro. A la democracia le llaman dictadura. A usted le costó mucho trabajo reconocer los resultados de las urnas. Vuelvan a ser un partido de Estado. dejen de hacerle el trabajo a la ultraderecha. .¿qué considera el gobierno que es calidad democrática?".
Fuentes de la Vicepesidencia a laSexta dicen que es "inaguantable la actitud del PP": "Tres meses intentando negociar todas las semanas. No quieren, no hay más tiempo. Somos los garantes del orden constitucional. La obligación de las Cámaras es hacer que las Instituciones funcionen".
Aseguran que no se puede esperar más, que el Poder Judicial "no respeta la mayoría elegida por los ciudadanos (ahora hay mayoría conservadora)". "Esta Cámara hará lo que tenga que hacer con cada mayoría que le entreguen los ciudadanos en las urnas. No hay forma humana de llegar a un acuerdo", insisten.
Desde el PP, apuntan la fuentes que "si el Gobierno quiere negociar, que apoye la despolitización de la justicia y que saque a Podemos de la ecuación", de la renovación de los miembros del Poder Judicial.
Fuentes de Podemos, por su parte, sostienen que la reforma no es una ocurrencia ni tiene nada que ver con lo de Pablo Iglesias y el Supremo. Aseguran que ellos lo llevan proponiendo mucho tiempo y que incluso lo llevaban en su programa electoral. Afirman que Sánchez "lo ha visto como una buena idea y la ha hecho suya tras constatar el bloqueo del PP y la imposibilidad de llegar a un acuerdo".
Dudas entre los socios de investidura
Los socios de investidura de Sánchez tampoco parecen muy de acuerdo con esta reforma. Gabriel Rufián, de ERC, ha dicho que "da miedo según qué reforma pensando en que la extrema derecha llegue algún día al poder. Puede ser pan para hoy y hambre para mañana".
También el portavoz de Más País, Íñigo Errejón, ha mostrado su preocupación: "Nos preocupan cambios en las reglas que puedan ser malos a largo plazo. Estamos de paso, si quitan contrapesos, cuando estén en la oposición lo sufrirán". Ha añadido que lo están estudiando, "pero nos preocupa mucho. Las reglas del juego son garantías para todos".
Por su parte, el PNV ha afirmado que la "reforma" de los órganos constitucionales "es una obligación legal", pero para ello "debe imperar el diálogo entre partidos y puedan alcanzarse consensos que permitan esas mayorías cualificadas".
"Compartimos la necesidad de reformar la ley del Poder Judicial para limitar las funciones de un órgano judicial cuyo mandato ha caducado. No consideramos tan idóneo, sin embargo, modificar las mayorías para renovar el órgano de gobierno de los jueces. Es por ello que apelamos de nuevo a la sensatez y la cordura para que el diálogo entre partidos pueda reconducirse", ha expresado en un comunicado.