La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha anunciado la apertura de expedientes sancionadores contra organizadores de la Marchas de la Dignidad del sábado pasado, en las que ha dicho que hubo radicales que intentaron matar a policías.
Cristina Cifuentes ha lamentado que solo uno de los veintiún detenidos el sábado haya sido enviado a prisión por la autoridad judicial a pesar de que algunos tienen antecedentes por hechos similares. Además, ha indicado que el detenido que ha ingresado en prisión y está únicamente acusado de lesiones, aunque espera que finalmente pueda ser condenado por intento de homicidio de un policía.
Cristina Cifuentes ha calificado de "espeluznantes" los incidentes del sábado en Madrid y ha asegurado que nunca vio nada semejante ni un ataque con tanta brutalidad. Ha apostillado que los violentos "fueron contra la Policía con saña", hasta el punto de que casi mataron a un agente a patadas en la cabeza, mientras que otros también resultaron con heridas de todo tipo.
Según la delegada, los violentos rompieron marquesinas y otros objetos del mobiliario urbano que arrojaron a los policías, lanzaron petardos e iban pertrechados con palos con cuchillas en un borde, a modo de arma.
Respecto a las críticas de los sindicatos policiales sobre posibles fallos en el dispositivo, ha comentado que hay que aprender para que estas situaciones no se repitan y ha mostrado su satisfacción por que el Ministerio del Interior haya abierto una investigación interna.
En este sentido, ha comentado que quizá haya que hacer un replanteamiento de los operativos, habida cuenta de que las actuaciones de estos radicales está cambiando. "Hasta ahora los violentos esperaban a que la manifestación acabara" pero en esta ocasión no lo hicieron y atacaron poniendo incluso en riesgo a niños y personas mayores.
Respecto a las denuncias sindicales, Cifuentes ha insistido en que no se ordenó a la Policía que no usara material antidisturbios y ha dicho que, de hecho, se contabilizaron 169 pelotas de goma lanzadas por los agentes y que, como siempre, se indicó que su utilización fuera proporcional a la gravedad de la situación.
Cifuentes ha lamentado que mientras se estaban produciendo los incidentes algunos intervinientes en el acto central de la manifestación "decían cosas que no eran tranquilizadoras incluso contra la Policía", que se podrían entender que incitaban contra ellos.
La delegada del Gobierno ha explicado que hará uso de mecanismos que proporciona la ley y que va a abrir expedientes contra organizadores, en concreto de la marcha de Madrid y de las "columnas" que pasaron por las localidades madrileñas de Arganda y Perales de Tajuña, que pueden desembocar en sanciones económicas, para lo cual ha pedido informes a la Abogacía del Estado.