Optimismo. Es lo que se desprende del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre los efectos y las consecuencias de la pandemia en la sociedad española. Y en parte de ese optimismo tiene mucho que ver la vacuna. El 61,2% de la población cree que cuando se alcance la inmunidad de grupo, lo que se estima sucederá al finalizar el verano, podrá recuperar su vida como era antes de la pandemia, mientras que el 15,7% no concibe ésta posibilidad y un 11% cree que tras conseguir la inmunidad aún no se podrá hacer lo mismo que en prepandemia. Un porcentaje parecido duda en su respuesta.
En comparación con la anterior encuesta, publicada en diciembre del pasado año, ha subido 14 puntos la población (47,6%) que confía en la vacunación para recuperar la normalidad. Aunque, también ha subido la población que desconfía, hasta 3 puntos con respecto a los escépticos en la anterior encuesta.
Según señala el CIS, aquellos que no confían en la vuelta a la normalidad, el 26,8% afirma que ha habido muchos cambios en todos los ámbitos y la vida no va a ser igual (crece 5 puntos); un 25,5% defiende que tiene que pasar tiempo para la normalidad y para ver los efectos (4 punto menos); un 15,7% (10 punto más) cree que tendremos que seguir tomando medidas; y un 6,2% cree que tendría que estar toda la población vacunada, que sería necesaria la inmunidad total (baja 5 puntos).
Es llamativo que hace seis meses un 21,9% de la población afirmaba no confiar en la vacuna, en la rapidez con que se ha fabricado y dudaba de su eficacia, por lo que cuestionaba la inmunidad de grupo y la vuelta a la normalidad. Este porcentaje ha bajado hasta el 4,2%, lo que supone la bajada de 17,7 puntos.
Sí hay coincidencia en que la pandemia está cambiando la forma de vida, de pensar y de cuidar la salud.
Así lo piensa el 69,2% de la población encuestada, que considera que la epidemia ha variado "mucho" o "bastante" su forma de vida, un 49,4% su modo de pensar y un 52,2% afirma que ha condicionado "mucho o bastante" la manera de cuidar la salud.
Las relaciones sociales son uno de los aspectos donde los ciudadanos aprecian más cambios en su vida; así opina el 42,1% pero cuando se pregunta por cambios en la manera de pensar, un 21,4% dice que "valora más lo que se tiene, lo que es importante, la vida, la familia y la salud".
El estudio revela que la pandemia ha traído aspectos positivos en los cuidados de la salud. El 33,8% valora las medidas higiénicas (mascarillas, limpieza y ventilación) y un 25,2% reconoce que ha cambiado de hábitos y cuida más su alimentación y el deporte.
Al igual que en otros sondeos, la pandemia en España y en otros lugares preocupa "mucho o bastante" al 86,8% de la población y son los aspectos económicos y laborales los que más afectan a las familias en un 61,8% frente a la salud y la atención sanitaria, que intranquiliza al 32,7%.