Ceuta y Canarias se encuentran sobrepasadas ante la llegada masiva de migrantes. Una situación límite sobre la que los presidentes de ambas comunidades autónomas se han pronunciado alertando de la situación extrema que viven, pidiendo el apoyo del Estado y del resto de CCAA.

Fernando Clavijo, presidente de Canarias, ha anunciado en una entrevista en 'RNE' que va a reunirse con el 'popular' Juan Jesús Vivas, presidente de Ceuta, para intentar que, con este encuentro, las CCAA sepan que los migrantes "están empezando a llegar también a Baleares y Alicante".

Una reunión con la que pretenden dejar claro lo importante que es que "todas las CCAA se unan". "La modificación de la Ley de Extranjería nos compete a todos", ha asegurado.

"Tenemos la obligación de dar respuesta a la ciudadanía y a un drama humanitario donde Europa tiene que asumir su responsabilidad", ha señalado el presidente canario, destacando que también han acordado enviar una carta a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, para que "venga y conozca de primera mano la realidad en Canarias y Ceuta" porque consideran que "la UE no puede ser ajena a ello".

Clavijo ha destacado que las personas están comenzando a entender que hay que dar una "respuesta distinta" a esta situación, destacando que se trata de un "fenómeno estructural donde tenemos que estar todos unidos".

Clavijo advierte: "Esto será un sinvivir"

Durante su entrevista, Clavijo ha confesado que ver que la reforma de la Ley de Extranjería no salía adelante fue "un golpe muy duro", reconociendo que se sienten "francamente solos". Sin embargo, espera que se pueda alcanzar a un acuerdo, señalando que no se entendería que no fuese así.

"Ves que algo malo va a ocurrir, lo adviertes, lo dices, lo explicas, pero nadie te entiende, nadie te escucha hasta que ocurre. El problema es que va a ocurrir con niños", ha señalado.

El presidente canario ha destacado que, si sucede lo mismo que en 2023, acabarán el año con más de 50.000 migrantes, destacando que en los próximos meses es cuando más llegadas se producen. "Esto será un auténtico sinvivir", ha asegurado.

Una situación que no están preparados para poder afrontar. "Ya no se encuentran inmuebles, espacios ni personal para atender a los niños", ha indicado. Por tanto, ha destacado que este otoño podemos encontrarnos "imágenes y situaciones dantescas de niños y niñas hacinados en carpas".

"Les estamos dando de comer y atendiendo mínimamente, pero no se están cumpliendo sus derechos y nos llena de frustración y vergüenza", ha reconocido, destacando que esto también está provocando que aumente la tensión social.

Un momento que ha aprovechado para explicar que lo importante es que la UE mire a África. "Necesitamos proyectos de cooperación y desarrollo pero también que la ley se modifique. La Ley de Extranjería no se hizo pensando en lo que estamos viviendo. Mientras la diferencia de riqueza sea tan brutal entre Europa y África, es legítimo que la gente huya del hambre y de la muerte y busque un futuro mejor", ha confesado.