En el Comité Federal del PSOE, los socialistas marcan la pauta a seguir en las conversaciones para formar gobierno. "En esta negociación a tres el PSOE va sin líneas rojas pero con firmes convicciones, poner fin al gobierno de Mariano Rajoy y materalizar el gobierno del cambio", ha expresado Pedro Sánchez.

Quieren relevo en el Gobierno de España y para ello se encomiendan a Ciudadanos y Podemos. "Los socialistas estamos dispuestos a ceder y pediremos a las fuerzas del cambio que gane España", ha indicado el secretario general del PSOE.

Fuentes de la dirección socialista interpretan como un avance la decisión de Podemos de dejar en manos de su militancia la abstención en una nueva investidura. Aunque en el PSOE preferían que esta situación se hubiera dado en la investidura fallida de Sánchez, los dirigentes socialistas ven con buenos ojos cualquier acuerdo que refrenden las bases.

"Me siento cómoda con un Gobierno que salga de la resolución del 28 de diciembre", ha asegurado la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz". Algunos reconocen errores. "Venimos a rectificar un error, no podemos fijar la fecha de un Congreso sin tener claro el calendario político del país", ha reflejado Miquel Iceta, dirigente del PSC.

Pero más allá de esta cuestión, otros líderes regionales se muestran esperanzados. "Soy optimista por naturaleza y será un fracaso si hay nuevas elecciones", ha expresado Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana.

A puerta cerrada, el presidente de Aragón, Javier Lambán, se mostraba muy duro con las declaraciones de Xavi Doménech: "Ellos aceptarían un referéndum quebequés y lo harían después de un referéndum sobre una reforma federal", decía el portavoz de En Comú Podem. Y le ha dejado claro a Sánchez que no puede ceder con el tema del derecho a decidir ni aceptar un referéndum de independencia como el que se celebró en la provincia canadiense de Quebec.