Esta decisión judicial se adopta después de que la Junta de Tratamiento del Centro Penitenciario de Alhaurín de la Torre informara favorablemente por unanimidad a la concesión de la medida y de que el ministerio fiscal la apoyara también.
Zaldívar ya disfrutaba del tercer grado penitenciario desde el pasado 12 de agosto, tras un informe favorable del ministerio fiscal y del psicólogo del centro penitenciario y porque la reclusa ya había cumplido más de la mitad de la condena impuesta por los tribunales de justicia.
La expareja de Julián Muñoz ingresó en la cárcel en octubre de 2014 para cumplir una condena de dos años y medio por blanqueo de capitales en un procedimiento en el que también fueron condenados la tonadillera Isabel Pantoja, Julián Muñoz, su hermano Jesús Zaldívar y otras tres personas.
La concesión de la libertad condicional fue acordada por el Juzgado el pasado 9 de diciembre y tendrá efecto a partir del 1 de enero de 2017, según han informado a Efe el gabinete de prensa del TSJA.
Como en todos los casos en que se acceda a este régimen, la persona condenada en firme no podrá cometer ningún tipo de acto delictivo durante la vigencia del mismo, que se prolongará hasta la extinción de la condena impuesta por los tribunales.
El Juzgado de Vigilancia de Málaga había concedido a Zaldívar el tercer grado penitenciario lo que le posibilita el cumplimiento del resto de su condena en régimen de semilibertad.
Entonces, el acuerdo se adoptó con el informe favorable del ministerio fiscal, del psicólogo del Centro Penitenciario y porque la reclusa había cumplido ya más de la mitad de la condena impuesta por los tribunales de justicia.
Durante el juicio, la defensa de los Zaldívar admitió que Maite creó sociedades y movió dinero del exalcalde de Marbella a Suiza, pero sin conocer su procedencia ilícita.
También reconoció que, tras el divorcio, Maite Zaldívar intentó poner a salvo de Muñoz el dinero que quedaba en casa y que fue el hermano de ésta quien le quiso ayudar para que tuviese algo, pero que él no se quedó con nada.
En la vista oral mantuvieron que los dos pensaban que el dinero podía proceder de las actividades políticas legales de Muñoz y sus negocios con promotores inmobiliarios.