Los Mossos d'Esquadra han detenido a un agente del cuerpo acusado de haber ayudado a Carles Puigdemont a huir. El expresident catalán había regresado a España con motivo del debate de investidura que se está celebrando en el Parlament para hacer a Salvador Illa president de la Generalitat.

Como si de un truco de magia se tratara, Puigdemont ha desaparecido tras reaparecer ante cientos de manifestantes en el Arco de Triunfo de Barcelona que han querido arroparle en su regreso entre vítores y gritos de "independencia".

Al parecer, según ha podido saber laSexta, un mosso ha sido detenido acusado de haber colaborado en la huida de Carles Puigdemont. El expresident se habría marchado en un coche marca Honda de color blanco. Los agentes no descartan que se produzcan más detenciones de personas que podrían haber ayudado a su fuga.

La policía catalana, que había activado el nivel 3 del operativo "Jaula" para localizar a Puigdemont, trabajando con las matrículas de dos vehículos que han permitido la huida del expresident, uno de los cuales podría ser el coche blanco en el que le habría ayudado a huir el mosso detenido. Sin embargo, finalmente han decidido desactivarla sin haberle localizado.

También se investiga si las personas que acompañaban a Puigdemont a su llegada al acto en Arc de Triomf, lo que ha hecho cruzando las calles de Ciutat Vella -sin apenas transeúntes, lo que habría permitido una detención en condiciones seguras-, eran mossos d'esquadra de permiso.

Si agentes de la policía catalana, incluso fuera de servicio, hubieran colaborado en la huida de Puigdemont una vez en España, podrían haber incurrido en un delito, ya que el expresidente catalán tiene una orden de detención nacional vigente que vincula a todos los efectivos de las fuerzas de seguridad del Estado.

De hecho, tras la huida de Puigdemont, fuentes del Tribunal Supremo han subrayado a EFE que el juez Pablo Llarena dejó claro en el auto en el que descartó amnistiarlo que la orden de detención sigue vigente y, por lo tanto, las fuerzas de seguridad tienen la obligación de arrestarlo y ponerlo a disposición judicial.

Precisamente, cuando en 2017 abandonó España tras la activación del artículo 155 de la Constitución -aunque todavía sin orden de detención- Puigdemont contó con la ayuda de Lluís E., agente de los Mossos d'Esquadra que después fue condenado, junto al exconseller de Interior Miquel Buch, por ejercer de escolta del expresidente catalán en el extranjero mientras estaba contratado como asesor del Departament.

Tanto Buch como Lluís E. fueron condenados a cuatro años y medio de cárcel y cuatro años de cárcel por malversación, respectivamente, aunque han sido los primeros amnistiados por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.