El magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha acordado que la exconsejera catalana Clara Ponsatí sea puesta en libertad una vez se le haya tomado declaración en el Juzgado de Guardia de Barcelona. Lo ha confirmado el Supremo unas horas después de que los Mossos d’Esquadra detuvieran a Ponsatí por un delito de desobediencia tras dejarse ver en Barcelona.
Para ello, se ha adjuntado a su auto una relación de las preguntas dirigidas a Ponsatí en este trámite, que añade que la detenida debe ser puesta a continuación en libertad dejándose sin efecto la orden de detención acordada en su día. El juez Llarena tomó la decisión "considerando que la renuencia de la acusada a someterse a la ineludible declaración indagatoria invalida cualquier intento de citación que pretenda alcanzar su comparecencia en libertad", pero valorando también que "la conducción policial al Supremo supondría una extensión de su privación de libertad en un delito para el que no están previstas penas de esta naturaleza".
Los Mossos d'Esquadra habían detenido a la eurodiputada de Junts y exconsejera de Educación de la Generalidad de Cataluña en el Gobierno de Carles Puigdemont tras dejarse ver en Barcelona. El juez instructor de la causa del procés, Pablo Llarena, había emitido una orden de detención nacional contra Ponsatí debido a su incomparecencia injustificada ante el tribunal para prestar declaración indagatoria por el delito de desobediencia, por el cual está siendo procesada.
El magistrado sostenía que la investigada había ignorado voluntaria e injustificadamente la citación judicial, por lo que acordó su detención nacional con el fin de tomar su declaración indagatoria.
La propia europarlamentaria confirmaba su detención en su cuenta de Twitter. "He vuelto a ser detenida ilegalmente en Barcelona", ha expresado tras haber colgado apenas horas antes fotografías en Barcelona: "Aprovechando el fresco de la mañana he hecho un vuelo hasta la Casa Vicenç. Mientras estemos aquí, Cataluña continuará de pie. ¡Buenos días, Barcelona!".
La eurodiputada ya fue detenida por los Mossos en Barcelona el pasado 28 de marzo, cuando regresó a España tras cinco años huida de la justicia española, en virtud de la orden de detención que tenía pendiente por facilitar el referéndum del 1-O.
Tras ser conducida a los juzgados de guardia de Barcelona, la exconsellera de Enseñanza quedó en libertad con la obligación de comparecer ante el Supremo el 24 de abril, pero Ponsatí volvió a plantar a Llarena, lo que ha motivado su nueva detención para notificarle el procesamiento, trámite obligatorio para seguir adelante con la causa por desobediencia contra ella.
La reacción de sus compañeros de partido en Twitter no se hizo esperar, el presidente de la formación huido en Bélgica, Carles Puigdemont, ironizó en torno a la detención de Ponsatí y la petición de la Fiscalía sobre su orden de detención. "Un día eres decisivo para formar un gobierno en España, al día siguiente España ordena tu arresto", indicó.
Por su parte, Jordi Turull también miembro del partido y condenado a 12 años de prisión en la causa del 'procés' declaró a través de Twitter que "para los que lo nieguen, es evidente que el conflicto político persiste y la represión del Estado contra el independentismo también", además se solidarizó pidiendo todo el apoyo para la eurodiputada.
La expresidenta del parlamento catalán ha valorado la detención apenas un día después del 23J y de que Junts se haya convertido clave para dar la gobernabilidad en una posible investidura de PSOE con Sumar. "Los tribunales ya han realizado su propio análisis de los resultados electorales.¡Han movido ficha antes que Pedro Sánchez! Detención para la consejera y euroorden por detener al Presidente Carles Puigdemont y al consejero Toni Comín".