Díaz Ferrán se ha pronunciado así durante su declaración como acusado en el juicio que ha comenzado este miércoles en la Audiencia Nacional, en el que la Fiscalía pide para él y para el expresidente de Air Comet Antonio Mata, una pena de dos años y cuatro meses de prisión por defraudar supuestamente a la Hacienda Pública una cuota de 99 millones de euros.
Los hechos se remontan a 2001, cuando la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) vendió a Air Comet el 99,2% de Interinvest, una mercantil domiciliada en Argentina que a su vez era propietaria del 92,1 % del capital de Aerolíneas Argentinas.
'Estábamos seguros, y lo estamos ahora, de que no había que pagar nada a Hacienda'
El precio de venta fue de un dólar, pero la SEPI se comprometió también a aportar a Interinvest hasta 300 millones de dólares que Air Comet debería destinar a satisfacer pagos a los acreedores de la sociedad adquirida.
Air Comet, sin embargo, utilizó el dinero no para pagar a los acreedores, sino para subrogarse en su posición en el proceso de suspensión de pagos, lo que le permitió posteriormente recuperar el 40 % de lo invertido gracias al convenio aprobado por Aerolíneas Argentinas para saldar sus deudas.
De este modo, los acusados dejaron de ingresar a Hacienda una cuota de 99 millones de euros en concepto de Impuesto de Sociedades, cantidad que el Ministerio Público pide que los acusados indemnicen al fisco.
"Estábamos convencidos de que no había que pagar nada a Hacienda", ha insistido el expresidente de la patronal española, que ha añadido que, de haber creído que la operación estaba sujeta a tributación, hubieran pedido a la SEPI que también aportara ese dinero, ya que "Hacienda y la SEPI son prácticamente lo mismo".
La abogada del Estado le ha preguntado por qué los socios de Air Comet firmaron entonces un compromiso que incluía una cláusula en la que se establecía que las "consecuencias fiscales" de la operación, "cualesquiera que estas sean y en cualquier lugar en que se produzcan (...) no serán reclamadas por ninguno de los participantes a la SEPI".
'Si no firmaba un funcionario de la SEPI no se podía sacar ni un euro'
"Es una cláusula absolutamente normal en cualquier compraventa, lo que digo es que estábamos seguros, y lo estamos ahora, de que no había que pagar nada a Hacienda por parte de Air Comet", ha respondido Díaz Ferrán, que ha dicho que la compañía no obtuvo ningún beneficio de la compra de Aerolíneas Argentinas, que se adquirió "con intención de reflotarla".
A preguntas de su abogado defensor, Nicolás González-Cuéllar, el acusado ha dicho también que la SEPI eligió a Air Comet para que se hiciera cargo de Aerolíneas Argentinas entre varias ofertas y que fue esta sociedad pública la que diseñó el plan para reflotar la compañía.
También ha dicho que todo el dinero aportado por la SEPI fue empleado para pagar a los acreedores de Aerolíneas Argentinas y que los 300 millones aportados se depositaron en una cuenta de la que solo se podía disponer con firma de la SEPI.
"Si no firmaba un funcionario de la SEPI no se podía sacar ni un euro", ha declarado Díaz Ferrán, que ha sido conducido a la Audiencia Nacional desde la cárcel de Soto del Real, donde permanece desde hace un año en prisión provisional por la causa en la que se investiga el vaciamiento patrimonial del grupo Marsans.
Antes de que comenzara su interrogatorio, la defensa de Mata ha planteado como cuestión previa la prescripción del delito fiscal por el que se le juzga, pero el juez que preside la vista, José María Vázquez Honrubia, la ha rechazado de plano recordando que la sala de lo penal ya desestimó en su día esta alegación.